El viernes 28 empezó el MedicineX de Stanford con un día entero dedicado a «self-tracking», en español «auto-monitoreo», concepto que se facilita gracias a las tecnologías móviles de las que disponemos.
Susanah Fox empezó el día mostrando los últimos sondeos y las posibilidades y realidades que albergan estos datos. Entre ellos el 85% de adultos (U.S.A.) poseen un «smartphone» pero sólo el 11% tiene instalada una aplicación de salud, número que en 2012 no ha mejorado como se esperaba versus 2011. También se tiene que tener en cuenta que hay todavía confusión en el mercado sobre que es una aplicación de salud, muchas estadísticas cuentan todas las aplicaciones de fitness y parecidas.
Hablando de monitorizarse compartió que un tercio de la población que se monitorea comparte sus datos, incrementando las posibilidades de obtener «Big Data». También el impacto que éste tiene, ya que el 34% del total de los que se monitorean con ayuda de aplicaciones han tomado una decisión para mejorar su salud.
Fue interesante ver la perspectiva de los pacientes sobre el auto-monitoreo (de mano de Katie,Sean y Allan). Gracias al monitoreo de su comida, ejercicio y medicinas (algunos con ayuda de un «coach»), pudieron identificar lo que les desencadenaba reacciones no deseadas al igual que ver otros elementos que les producían un estado beneficioso, una de las pacientes ponentes explicó, a modo de curiosidad, que a través del auto-monitoreo consiguió identificar una fruta que le producía que su enfermedad auto inmune se disparara, pero que conseguía remediar su efecto tomando ajo justo después. Algunos también expresaron su frustración diciendo «quisiera trabajar con un doctor que me creyera a mi y mis datos» aunque también coincidieron que varios doctores empezaban a ser curiosos sobre el tema, aunque no se involucraran.
Durante la jornada se discutieron los problemas que pueden aparecer. El problema que tienen la data del auto-monitoreo es que a pesar de generarse con mucha facilidad y en grandes cantidades, ésta es difícil de estandarizar e interpretar. Asimismo salieron a la luz los problemas de monetización y los conflictos de interés que debido a la privatización de la salud y a la falta de información. También se habló de la falta de efectividad del auto-monitoreo y la escasez de su «atención al cliente».
«Its not really about the data it’s the process of having someone by you, trying new things, behaviour changes while motivated.»